Me gusta...
Me gusta peinarme, y que el pelo me quede liso, u ondulado, pero que siga un patrón uniforme. Me gusta peinarme y que el pelo esté perfectamente desenrredado. Detesto cuando me doy tirones fuertes al peinarme.
Me gusta dormir. Me encanta estar en la cama, al calorcito. Me deleito al dejar volar mi imaginación cuando estoy a punto de dormirme, o nada más despertarme, y ver lo genial que es todo en mi mente. Por el contrario, no me gusta en abosuluto cuando me voy a la cama y no puedo encontrar la postura para dormir, porque estoy nervioso a causa de un exámen, o de que algo ha salido mal.
Me gusta aprender. Disfruto adquiriendo nuevos conocimientos, por inútiles que sean. Me encanta aprender cosas y entenderlas, y luego demostrarme que lo sé y lo comprendo. Me gusta poder demostrar mis conocimientos delante de los demás, por ayudalos o solo por añadir algo interesante a la conversación. Detesto que evaluen mi conocimiento, con exámenes y pruebas que no necesariamente evalúan todo lo que sé.
Me gusta ver películas. Disfruto con casi todas, al menos si se dan ciertas circunstancias. Adoro las comedias, porque me hacen sonreir. Tambíen las películas para niños, porque están cargadas de valores. Disfruto con las más profundas, y con aquellas que me hacen llorar. Incluso con las románticas. Pero por el contrario, no me gusta demasiado el género de terror, porque no le veo sentido a sufrir angustia por algo que no es cierto, y considero que las películas son para disfrutarlas.
Me gusta pasar tiempo con mis amigos. Me encanta que me pregunten que tal me va todo, y preguntarles yo a ellos. Que se preocupen por mí y preocuparme por ellos, y si puedo, ayudarlos. Me gusta que me llamen y me pregunten si puedo quedar. Pero detesto que no me llamen, porque siempre que llamo yo, tengo la impresión de que interrumpo, o soy inoportuno, o que tal vez en ese momento querían que no estuviera, porque prefieren estar a solas.
Me gustan los abrazos. Prefiero un abrazo antes que me den un beso en la mejilla o que me den la mano, al menos cuando hay suficiente confianza. O en el caso de las buenas amigas, un beso y un abrazo, siempre me sube el ánimo. Me gusta que mis amigos me pongan la mano en el hombro para decirme que están a mi lado y que me dan su fuerza.
Me gusta el rol. Me encanta el rol. Adoro el rol. Vivo el rol en todas sus variantes y fases. Me encanta diseñar sistemas nuevos, modificar los existentes y jugar a los que ya han sido inventados. Me encanta hacer el tonto y que los demás lo hagan, pero también disfruto con una partida seria en la que todos nos comportamos. Me incomoda cuando alguien no acepta el estilo de juego de otro, bien por formalidad o por falta de seriedad, porque creo que cada uno debe interpretar como su sentir le indique. Me gusta el rol porque es un arte. Es como ser actor, pero entre amigos. No tolero falta de profesionalidad por parte de los jugadores, pues considero que es algo que aunque se juegue de modo informal y poco serio, hay que tener la seriedad suficiente como para transmitir interés por el juego, ya que el master gasta su valioso tiempo en prepararlo.
Me gusta corregir a los demás. ¿Es un defecto o un mérito? No lo sé, pero me encanta. Disfruto cuando me sacan errores a mí también. Sin embargo, me molesta que expresen mis fallos de forma pública, aunque trato de encajarlo lo mejor posible, ya que yo también corrigo de forma pública.
Me gusta contar el dinero que tengo. Me gusta ahorrar y no gastar, con miras en unas vacas flacas que tal vez nunca vendrán. Detesto tener que gastar más dinero de lo que tengo planeado, especialmente si lo gasto en mí mismo.
Me gusta creer en Dios. Me gusta hablar con Él, y sentir que me escucha y que me responde. Y me gusta ver su mano invisible en muchas de las cosas que me pasan. Me gusta aprender a fundamentar mis creencias y fortalecer mi fe. Me duele enormemente que mi fe no sea tan fuerte como lo era antes. Me duele cuando veo que no hago las cosas como debería según mi credo, y pido perdón a Dios, y luego las cosas van bien, porque siento que Él me está dando mucho más de lo que yo le doy a él. Me duele que la gente trate de hacerme abandonar mis creencias con argumentos que ellos consideran lógicos... pero Dios está por encima de la lógica... cuando tratas de verter el contenido de un pantano en un vaso de agua, el agua lo desborda, y de ese mismo modo Dios desborda nuestra inteligencia. Me gusta pensar que Dios está ahí arriba, y que nos mira a todos con ojos de padre, y que tendrá misericordia de nosotros por hacer las cosas tan mal.
Me gusta todo lo antiguo, especialmente lo medieval. Es una pasión que tengo. Me encantan los pergaminos y los códices. Me encantan los retablos. Me encantan los edificios antiguos, los monasterios y catedrales. Me encantan las armas medievales, especialmente las alabardas. Me encantan las armaduras y escudos.
Me gusta la magia, o lo que lo parece. Me encantan los trucos de los ilusionistas. Disfruto en casa, inventando las palabras que componen los conjuros que saco de los libros de rol o de mi imaginación, inventando los gestos que hay que hacer para lanzarlos, y practicándolos todo junto frente al espejo o a un cristal.
Me gusta la simetría. Me hizo mucha grqacia cuando la profe de Artística lo asoció a que soy un tipo conservador, y luego dedujo que sería un buen partido para una mujer porque soy "de esos tipos que se casan paratoda la vida y no tienen intención de separarse nunca".
Me gusta que me elogien y que me digan lo genial que soy a veces. Me encanta ver cuales son mis puntos fuertes, del mismo modo que me gusta saber los débiles. Sin embargo, me resulta súmamente molesto que me hagan la pelota, porque considero que en realidad es una forma de desprestigiar mis méritos.
Me gusta pasar tiempo con mi madre, reirme con ella, hablar con ella, ayudaarla cuando lo necesita, que ella me ayude cuando lo necesito. Me encanta cuando nos enfrascamos en una conversación ilógica, sin pies ni cabeza, que acaba en medio de ningúna parte. Me duele no decirla más a menudo que la quiero y darla un abrazo... Debo poner remedio a esta situación.
Me gusta la limpieza, hasta un punto obsesivo.
Me gusta la perfección, hasta un punto aún más obsesivo. Me resulta incómodo sacar sobresaliente y no matrícula. Me molesta sacar notable en vez de sobresaliente. Destesto sacar un aprobado en vez de un notable. Detesto cuando Word me saca fallos ortográficos que no existen, y tener que darle a "Agregar al diccionario" o "Omitir una vez" para no ver las líneas rojas bajo las palabras, ni la x sobre el librito de abajo.
Me gusta superarme a mí mismo.
Me gusta hacer cosas personalmente y artesanalmente.
Me gusta escribir listas.
Me gustan muchas cosas más.
Me gusta que leais mi blog.
Me gusta que te guste el buen gusto :D
ResponderEliminarTienes unos gustos muy lógicos.
Me encantan.